La primera vez
que compré el catálogo de una exposición fue cuando descubrí a Philip Guston en
el Museo Reina Sofía de Madrid, en 1989. No he comprado muchos más, entre otras
cosas porque los catálogos cada vez eran de mayor calidad y los precios no eran
asequibles para mi bolsillo de estudiante, y cuando ya me lo pude permitir,
pues no sé muy bien por qué…Supongo que por la misma razón que, después de
muchas visitas exhaustivas, me hace organizar muy bien mis visitas a
exposiciones y sobre todo museos cuando viajo.
Selecciono lo que quiero ver y entro como una exhalación, igual me despisto con algo pero no como cuando era más joven que visitaba tooooodas las salas, y justo cuando llegaba lo que más me gustaba, casi era la hora de irse.
Selecciono lo que quiero ver y entro como una exhalación, igual me despisto con algo pero no como cuando era más joven que visitaba tooooodas las salas, y justo cuando llegaba lo que más me gustaba, casi era la hora de irse.
Me fascinó Philip Guston y ahora he descubierto además que era un pintor "expulsado", como Giacometti cuando decidió abandonar el surrealismo (crochetingclub: alberto giacometti).
Su carrera pasó por lo que califican como el realismo simbólico, la pintura abstracta y la figuración autobiográfica. Grandes formatos para pintar desde una bombilla suspendida de un cordel, encapuchados, el brazo acusador, piernas kilométricas y suelas de zapatos, cigarrillos y puros siempre encendidos, motivos que repite y que pueden dar pistas sobre el autor.
Era hijo de inmigrantes ruso-judíos, nació en un gueto de Canadá a donde huyó su familia para escapar de los célebres pogroms de Odessa (violencia antisemita en dicha ciudad, Ucrania). Creció en California, en Los Angeles, a donde se trasladó con 6 años, y se instaló definitivamente en Woodstock, Estado de Nueva York.
Dicen que la obra de Guston refleja el diálogo interno que el artista mantuvo con sus demonios personales, aunque esto se dice de casi todos los pintores y artistas en general. Sí que es cierto que el momento histórico que le tocó vivir, y sobre todo su experiencia vital no fueron precisamente amables. De niño encontró a su padre ahorcado de una soga, se había suicidado y Guston tenía solo 10 años. Vio también cómo su hermano mayor moría por gangrena; vivió con dificultades económicas y en plena depresión quería ser pintor…
Muchos asocian Guston con Nueva York, donde se instaló en la década de los 40 y su etapa en LA fue realmente interesante, allí vivió desde los 6 hasta los 23 años, en el barrio de Venice. Desde adolescente pintaba en un pequeño trastero iluminado por una bombilla que colgaba de un hilo y estudió arte en la Manual Arts High School en downtown, donde además coincidió con Kadish, cuya familia también huía de Europa, y con Pollock.
Fueron expulsados por repartir panfletos criticando que todo el dinero se destinase al deporte y nada al arte, dibujaron un perro moviendo la cola y escribieron la siguiente frase: "Shall the Tail Wag the Dog?"
Era un momento histórico complicado, era la época de los "Red Squads", un grupo especializado de la policía que combatía el comunismo y los sindicatos, y que quemaban libros en casas particulares como le ocurrió a Kadish, según contó él mismo. Y era también la época previa al "Great Crash". Los intelectuales de la costa Este comenzaban a leer a Nietzsche, Spengler, Freud o Joyce y frente a revistas como The New Yorker se creaban otras más radicales (una publicación marxista vamos...) como New Masses. Mientras, Guston consiguió una beca para estudiar en el Otis Art Institute pero se hartó pronto, decía: "There I was, thinking about Michelangelo and Picasso and I had to study anatomy and build clay models of torsos." Un día amontonó todos los moldes de yeso y los dibujó, así lo conoció Musa Mckim, que sería su esposa. Guston dejó sus estudios y se convirtió en autodidacta. Durante el día tenía que trabajar y esto lo convirtió en testigo de huelgas, de la violencia con que estas se reprimían, también se comenzaba a hablar de los matones de la American Legion y del resurgir del Ku KLux Klan. Trabajó como extra en el cine y frecuentaba la famosa librería The Stanley Rose Bookshop, una leyenda en Los Angeles y donde Guston expondría su obra por primera vez a los 18 años. Librería que está en Vine Street, donde también está la estrella de Barbara Stanwyck, en el 1751, pero esa historia ya la conocéis...
Su encuentro con el artista, y mecenas de otros artistas, Arensberg fue muy importante para Guston, no podía permitirse asistir a sus clases, pero sí le llevaba su obra para que este la valorase. Arensberg vivía en una casa diseñada por Frank LLoyd Wright, y tenía una gran colección de pintura europea, que no era precisamente popular entre la crítica americana de la época. Allí Guston descubrió a Giorgio de Chirico, que fue muy importante en la primera etapa de su carrera, en la década de los treinta en los que practicó un estilo
figurativo, el realismo simbólico:
Su carrera pasó por lo que califican como el realismo simbólico, la pintura abstracta y la figuración autobiográfica. Grandes formatos para pintar desde una bombilla suspendida de un cordel, encapuchados, el brazo acusador, piernas kilométricas y suelas de zapatos, cigarrillos y puros siempre encendidos, motivos que repite y que pueden dar pistas sobre el autor.
Era hijo de inmigrantes ruso-judíos, nació en un gueto de Canadá a donde huyó su familia para escapar de los célebres pogroms de Odessa (violencia antisemita en dicha ciudad, Ucrania). Creció en California, en Los Angeles, a donde se trasladó con 6 años, y se instaló definitivamente en Woodstock, Estado de Nueva York.
Dicen que la obra de Guston refleja el diálogo interno que el artista mantuvo con sus demonios personales, aunque esto se dice de casi todos los pintores y artistas en general. Sí que es cierto que el momento histórico que le tocó vivir, y sobre todo su experiencia vital no fueron precisamente amables. De niño encontró a su padre ahorcado de una soga, se había suicidado y Guston tenía solo 10 años. Vio también cómo su hermano mayor moría por gangrena; vivió con dificultades económicas y en plena depresión quería ser pintor…
Muchos asocian Guston con Nueva York, donde se instaló en la década de los 40 y su etapa en LA fue realmente interesante, allí vivió desde los 6 hasta los 23 años, en el barrio de Venice. Desde adolescente pintaba en un pequeño trastero iluminado por una bombilla que colgaba de un hilo y estudió arte en la Manual Arts High School en downtown, donde además coincidió con Kadish, cuya familia también huía de Europa, y con Pollock.
Fueron expulsados por repartir panfletos criticando que todo el dinero se destinase al deporte y nada al arte, dibujaron un perro moviendo la cola y escribieron la siguiente frase: "Shall the Tail Wag the Dog?"
Era un momento histórico complicado, era la época de los "Red Squads", un grupo especializado de la policía que combatía el comunismo y los sindicatos, y que quemaban libros en casas particulares como le ocurrió a Kadish, según contó él mismo. Y era también la época previa al "Great Crash". Los intelectuales de la costa Este comenzaban a leer a Nietzsche, Spengler, Freud o Joyce y frente a revistas como The New Yorker se creaban otras más radicales (una publicación marxista vamos...) como New Masses. Mientras, Guston consiguió una beca para estudiar en el Otis Art Institute pero se hartó pronto, decía: "There I was, thinking about Michelangelo and Picasso and I had to study anatomy and build clay models of torsos." Un día amontonó todos los moldes de yeso y los dibujó, así lo conoció Musa Mckim, que sería su esposa. Guston dejó sus estudios y se convirtió en autodidacta. Durante el día tenía que trabajar y esto lo convirtió en testigo de huelgas, de la violencia con que estas se reprimían, también se comenzaba a hablar de los matones de la American Legion y del resurgir del Ku KLux Klan. Trabajó como extra en el cine y frecuentaba la famosa librería The Stanley Rose Bookshop, una leyenda en Los Angeles y donde Guston expondría su obra por primera vez a los 18 años. Librería que está en Vine Street, donde también está la estrella de Barbara Stanwyck, en el 1751, pero esa historia ya la conocéis...
de Chirico 1925 |
Sobre aquellos murales poco se puede contar, parece que los famosos "Red Squads" se encargaron de ellos...
Tras viajar a Mexico donde también trabajó como muralista (fotografía de arriba a la derecha), se trasladó junto con su amigo Pollock a Nueva York. Allí compartieron los ideales del expresionismo abstracto. Era la época de un grupo de artistas quizá más conocidos que él, entre los que estaban Franz Kline, Mark Rothko, Willem de Kooning, Barnett Newman y Pollock. Guston dio el paso hacia la abstracción a finales de los 40, con un ligero retraso respecto al resto de sus compañeros del grupo neoyorquino, comienza la segunda etapa de su carrera:
Lo que más me interesa de su obra es justo lo que pinta cuando rompe con la abstracción, en los años setenta y contra todo pronóstico vuelve a la figuración. Fue en una exposición en la galería Marlborough de Nueva York donde desveló su retorno a la figuración, perdió a viejos amigos que lo consideraron un hereje. Dijo sentirse "como excomulgado de una secta" y solo De Kooning mientras cenaba con él en un chino le dijo: "tu verdadero tema, Philip, es la libertad". Guston añadió: "Me sentí como un explorador que está a punto de alcanzar la cima del Himalaya cuando se da cuenta de que ha olvidado parte del equipo y, en la bajada, se ve forzado a tomar algunos atajos". En The New Yorker sentenciaron que regresando a la figuración, había vuelto a un arte inmediatamente comprensible, se burlaban de sus encapuchados...
Philip Guston sentía que había llegado a un punto muerto con la abstracción: "A medida que avanzaban los años sesenta me sentía dividido, esquizofrénico. La guerra de Vietnam, la situación en EE UU, la brutalidad del mundo. Qué tipo de persona soy: leo revistas en casa, y me acosa una furia frustrante; pero luego voy al estudio a ajustar un rojo sobre un azul. Debía hacer algo. Sabía que se estaba abriendo una senda delante de mí. Una senda cruda, a medio formar. Quería ser un todo de nuevo, como lo era de niño...quería ser una unidad entre lo que pienso y lo que siento". (lenguaje de artista lo sé, pero es lo que dijo!)
¿Qué es lo que había hecho? Volver a la
figuración, pero los guardianes de la ortodoxia se sentían en el derecho a
excomulgar, como Breton con Giacometti, o como a Bob Dylan cuando introdujo en
sus canciones el sonido de las guitarras eléctricas. Cuando Philip Guston empezó
a llenar sus lienzos de figuras como de cómic (era un entusiasta de las
ilustraciones de George Herriman y Budd Fisher), de objetos comunes como zapatos, libros, edificios, pilas de cerezas,
relojes, encapuchados, botellas o platos de espaguetis…de la noche a la mañana
se convirtió en un apestado.
Y Guston solo dijo sentir la necesidad de limpiar la mesa de un manotazo, de mirar los objetos que rodeaban su vida y que durante muchos años no había querido pintar. Lo que quería ahora era mirar como un hombre de las cavernas que por primera vez dibuja un animal, con pocos trazos. A los cincuenta y tres años pertenecía al grupo de la gran pintura americana, junto a Pollock, Kline, Rothko...a los cincuenta y siete fue criticado con saña. Para mí comenzaba lo que más me fascina de su obra. Dibujaba lo que veía, lo que le daba miedo, lo que le producía ira, enfrentándose a la brutalidad de Vietnam y al racismo, a los delirios del presidente Nixon…No tuvo mucho tiempo, solo 10 años entre su bendita excomunión y su muerte.
Y Guston solo dijo sentir la necesidad de limpiar la mesa de un manotazo, de mirar los objetos que rodeaban su vida y que durante muchos años no había querido pintar. Lo que quería ahora era mirar como un hombre de las cavernas que por primera vez dibuja un animal, con pocos trazos. A los cincuenta y tres años pertenecía al grupo de la gran pintura americana, junto a Pollock, Kline, Rothko...a los cincuenta y siete fue criticado con saña. Para mí comenzaba lo que más me fascina de su obra. Dibujaba lo que veía, lo que le daba miedo, lo que le producía ira, enfrentándose a la brutalidad de Vietnam y al racismo, a los delirios del presidente Nixon…No tuvo mucho tiempo, solo 10 años entre su bendita excomunión y su muerte.
One-Shot-Painting es una serie que realizó en los años setenta,
dicen que dormía teniendo cerca todo lo que necesitaba para pintar al amanecer
las ideas que había tenido durante la noche, obras rápidas...
Quizá como muy bien dijo Muñoz Molina: cuando sintió que iba a morirse, a los sesenta y siete años, pensó con tristeza en todas las cosas vulgares que ya no volvería a ver.
Para finalizar os dejo la serie de dibujos que dedicó a su "adorado" Nixon: "Poor Richard"
Espero que os haya gustado.
Buen día!
203 comentarios:
«El más antiguo ‹Más antiguo 201 – 203 de 203Vooooooooooooooooy Pk :)
que hoy no he ido porque esta mañana he trabajado ;(
y estaba preparando unas cosillas :-f
Dulce noche para toda la afición madridista del blog...
oo) Hala Madrid oo)
Por Dios,,, que salga alguien en defensa de los filologos epicenos,,,,
El debate está en la calle
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