viernes, 19 de agosto de 2011

sevilla: la primera cenicienta



Me detuve al principio del post de Monni (que seguirá vuelta y vuelta en la playa............muacssssssssssssss y espero que no te hayas enfadado mucho con el montaje de tu avatar )
"C U R I O S I D A D E S:
El calzado más antiguo que se conoce es un par de sandalias fabricadas con paja trenzada, y que provienen de Egipto." 
Pues bien, hace tiempo que descubrí que parece ser el más antiguo, de hecho la primera cenicienta que se conoce no es una tierna dama de la corte, sino una adolescente egipcia.




Esta primera cenicienta ha inspirado a todas las demás y  según la época las versiones han sido adaptadas a su tiempo o a la moraleja que se quería difundir y sobre todo al público al que se dirijan, no es lo mismo un relato tras un banquete en una cena en la Corte, que una historia de niños; aunque en el fondo todas coinciden en lo esencial, una chica jóven y guapa que "espera a ser salvada" y convertirse en la esposa del príncipe (que dan por hecho que es lo más)............... menudo chollo jajajjaja y sobre todo que sumisión por parte de ella a los designios del príncipe............. vamos que lo que es que ella opine sobre su vida y sobre qué quiere hacer con su vida........... como que ni de coña.
rébecca dautremer: princesses, no viene mucho a cuento pero es que nos encanta !!!!!!!

Ainssssssssssssss que lástima de tanta aspirante a princesa, lo que se pierden...Ahí va:




la primera cenicienta
¿A qué no sabéis una cosa?: el cuento de la Cenicienta es de origen egipcio. Me imagino que ni lo suponíais, igual que yo hasta que me enteré, por eso voy a contároslo tal como me lo contaron a mí una noche en el desierto, contemplando de lejos a las enigmáticas pirámides y bajo el cielo estrellado.
“Sucedió hace mucho más de mil veces mil lunas y tuvo lugar en el lejano y antiguo Egipto...
Reinaba por aquel entonces un faraón joven y hermoso, además de valiente y sagaz, un faraón que poseía muchas concubinas y algunos hijos bastardos, pero ninguna esposa legítima que le hubiera dado un heredero que le sucediese en el trono. 
Sus consejeros le habían querido atar con el lazo matrimonial a princesas reales con quienes establecer alianzas políticas muy ventajosas, pero el joven faraón rechazaba siempre sus propuestas aduciendo que los quehaceres guerreros le tenían demasiado absorbido y que aún había tiempo para contraer nupcias.
dautremer: un faraón muy jóven...lo ha dicho sevilla
Los años transcurrían pues, y el faraón continuaba inmerso en sus batallas, expediciones y conquistas bélicas y el trono del Alto y Bajo Egipto no contaba con un heredero de sangre azul que pudiese sucederle como hijo de su soberano. Y de tal manera esta situación parecía no tener remedio, que incluso los dioses de su religión, empezaron a preocuparse.
Isis, la Madre, fue a visitar a su marido Osiris y le manifestó su preocupación por el hecho de que el joven faraón no tuviera descendencia. Osiris meditó sobre el problema largo tiempo y luego hizo llamar a su hijo Horus, el halcón.
-Hijo mío -le dijo-, te ordeno que vueles a mis amadas tierras del Nilo y encuentres solución al desapego que muestra el joven soberano reinante acerca de la cuestión de su matrimonio, ya que es menester casarse y perpetuar la dinastía.
Y dijo Horus:
-¿Cómo he de hacer, padre mío?
Y dijo Osiris:
-Tu ingenio te ayudará.
Y oyendo y obedeciendo, el noble Horus, se transformó en halcón y voló hacia las fértiles riberas del padre Nilo, porque el Nilo es la vida para Egipto y Horus sabía que allí iba a encontrar la solución al problema planteado.
Faraón, mientras tanto, regresaba victorioso de una guerra entre las aclamaciones de su pueblo.
Se soltaron palomas y se mandó erigir un obelisco que conmemorase tan brillante campaña, luego los escribas se pusieron a escribir los hechos de la batalla, cantando la gloria de Faraón y los escultores empezaron a tallar estatuas gigantescas de su soberano.
Atardecía y el joven faraón, desde la terraza de su palacio contemplaba la puesta de sol ensimismado, cuando de pronto, hete aquí que un rayo pareció descender del cielo y un hermosísimo halcón vino a posarse en su mano. El faraón, maravillado hasta el límite del asombro al comprobar que el halcón, aun siendo salvaje era manso, quedó todavía más sorprendido al comprobar que el ave rapaz llevaba en su pico, cogida por la breve cinta de cuero de una correa, la más diminuta sandalia de mujer que sus ojos hubieran visto nunca, y todavía no había tenido tiempo de comprender lo que aquello significaba y ya el halcón se alejaba raudo dejando a sus plantas la sandalia.
Faraón se inclinó recogiendo personalmente la prenda, y se dijo:
-¿A quién pertenecerá esta breve sandalia?... Su dueña tiene un pie pequeño y estrecho, lo que revela gentileza y donaire, también juventud... Debe ser adolescente y muy bella.
Y por primera vez en su vida, el faraón sintió como el amor entraba en su corazón y en aquel mismo instante y hora, se enamoró perdidamente de la desconocida poseedora de la sandalia, y como era el soberano del Alto y Bajo Egipto, mandó proclamar por todo su reino que sólo se casaría con la joven en cuyo píe se ajustase perfectamente aquella sandalia.
dautremer: que yaaa...!, no es Egipto..., pero nos gusta!
Al instante partieron en dirección a los cuatro puntos cardinales, mensajeros para extender la nueva y ya al día siguiente comenzaron a afluir al palacio real centenares de bellas jóvenes que iban a probarse la sandalia, pero... ¡Oh desilusión!, en ningún pie se ajustaba exactamente, ya que o bien sobraba o bien faltaba.
Faraón estaba desesperado, su desconocida amada no aparecía... Y fueron viniendo de todos los lugares de Egipto doncellas y más doncellas y en ningún pie se ajustaba la sandalia. Como la voz se corrió, hasta de los reinos vecinos llegaron aspirantes a la prueba, pero fue inútil, no hubo nadie que pudiera calzarse la diminuta sandalia.
El faraón se puso enfermo. No quería ni comer ni beber, no dormía, había olvidado las batallas, la gloria, sólo suspiraba y palidecía, sólo deseaba morir ya que la tristeza le devoraba.
La diosa Isis, muy preocupada otra vez, fue a visitar de nuevo a su esposo Osiris y le contó lo que sucedía en el país del Nilo, y Osiris, dios bondadoso y comprensivo, llamó a su hijo Horus, preguntándole enfadado:
-¿Es así como me obedeces?
Y dijo Horus:
-Padre mío, confía en mí.
Convirtiéndose en halcón, voló hasta el palacio del faraón en cuya cámara entro. Al verle, el joven monarca pareció revivir y ante el asombro de la corte entera que ya le daba por muerto, corrió en pos el halcón, diciéndole:
-¡Tú me trajiste su sandalia, dime, ¿dónde está ella?!
A lo que el halcón, con un aleteo le indicó: ‘sígueme’ y el faraón le obedeció. Salieron de palacio, cruzaron la ciudad y llegaron al Nilo, allí el halcón se posó sobre una barca y el faraón se subió a ella como improvisado marinero dado que empezó a remar siguiendo el vuelo del ave, de este modo alcanzó la otra orilla del río y se detuvo, porque el halcón había hecho lo mismo encima de la humilde morada de un pescador. Desorientado quedó Faraón ante aquel final, y más todavía cuando, abriéndose la puerta de la choza, surgió de su interior una bellísima adolescente que caminaba descalza. El faraón dijo:
-¿Quién eres, hermosa entre las hermosas, gentil niña?, pues no te conozco, ya que tú no viniste a mi palacio a probarte la sandalia...
Y la joven respondió con una voz más dulce que el soplo de la brisa:
-Cómo podía ser, mi señor, si yo soy tan pobre que sólo tenía un par de sandalias, y un día mientras me bañaba en el Nilo, debió venir algún ladrón y me arrebato una de ellas, de tal suerte, que no me pude presentar ante tu divina majestad, ya que únicamente me queda ésta, que es su pareja y no iba ir yo al palacio del faraón del Alto y Bajo Egipto, calzada de un pie y descalza del otro.
Y en así diciendo, la bella pescadora, extrajo de su delantal un pequeñísima sandalia, hermana gemela de aquella que Horus, el halcón, había llevado al soberano.” 
 No hace falta que os cuente el final de la historia, todos lo conocemos, ¿verdad? 

dautremer: l'amoreux
Aprovechando a traición, jeje, este correo de Sevilla, vamos a poner cositas de rébecca dautremer, primero su web: rebecca dautremer
Son ilustraciones del libro princesses y l'amoreux, pero cualquier libro que haya ilustrado merece la pena, seguro que la conocéis la mayoría.




Sevi, es que lo vi en mi mail y me reí mucho, así que me dije: para el blog... Y ahora podría buscar algo que tenga que ver con el crocheting pero es que me da igual!. Cuántos colaboradores, ainsss....
Gracias estas deseando escribir algo, lo veo, lo veo 
Hellfire:
El Príncipe tampoco lo pasa bien en estas historias de zapatos de cristal. Siempre bajo la amenaza de que le endosen a las hermanas feas y desagradables, con el peso del Reino, sin poder decidir por sí mismo... se limita a tratar de ganar tiempo recorriendo la comarca tomando medida de su reino, tipo el Viaje de Alfonso XIII a las Batuecas.....me he ido completamente de la historia, me suele ocurrir...(doy fe, le suele ocurrir)

20 comentarios:

gaveta dijo...

:*)
ainsss
que chulo, perdoname por las ilustraciones, joooo, no tienen mucho que ver, pero son tan delicadas...
que te guste sevi!
muacccs

madita dijo...

confieso que de momento me he quedado prendada con la ilustración, voy al contenido..

gaveta dijo...

me alegro de que te gusten las ilustraciones madita, es de nuestras favoritas...si es que te pones a pensar en cosas para publicar y sería un no parar, pero el el tiempo...no da! :-(

Txumai dijo...

El cuento termina así?

"No hace falta que os cuente el final de la historia.... pues todos lo conocemos, ¿verdad?"

:(

¿cómo termina? ... se casaron y fueron felices y comieron muchas perdices?

Sevilla dijo...

Nena gave, que cosa mas bonita de ilustraciones. me encantannnnnnnnnnnnnnnnnn

gaveta dijo...

jajaja
ilustraciones bonitas para una chica genial...!!!!!
:*)
me alegro de que te gusten sevi :-)

Sevilla dijo...

jajajaja Txumi si termina tal y como tu lo dices.Todos los cuentos suelen acabar así, sobre todo porque la moraleja, el aprendizaje o lo que querían lograr era educarnos a las niñas y a los niños de lo que teniamos que ser en la vida.

Ellos: príncipes, que se movían en el ámbito público y por tanto económicamente independientes, siempre con un tesoro que ofrecer, valientes, apuestos, el principe azullllllllllllllllllll.

Ellas: bellas niñas, jóvenes adolescentes, pero en todo caso, sumisas y hacendosas, necesitadas de ser rescatadas, con unas perspectivas estupendas, del ámbito privado de la casa de su padre, al ámbito privado de la casa de su príncipe.

Ellos eligen con quien quieren pasar su vida; ellas solo tienen que estar guapas y monas para ser elegidas, eso si, sí te elegian............ a callarte y a joerte porque cómo te ibas a revelar.............

el chollazo del siglo!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

gaveta dijo...

jajajajaja

gaveta dijo...

me ha encantado sevi :*)
deberías seguir escribiendo, mira que fotos te pongo 8-D

Sevilla dijo...

bueno , mas bien copiando jaajajajaja

gaveta dijo...

nooooo
que lo que más me gusta es de tu cocecha, jajaja

Sevilla dijo...

mi cosecha no está tan politicamente correcta como los cuentos

:-P

gaveta dijo...

sí que los cuentos son politicamente correctos, jajaja, ya lo podían ser un poco menos y dejar menos tarados, que menudo reguero...jajaja

Sevilla dijo...

hay unos, que me los regalaron unos amigos que se llaman justamente

cuentos políticamente incorrectos jajajjajaa

los traia fritos y claro cuando los vieron se acordaron de mi jajajja

gaveta dijo...

pues buscalos y los publicamos, con tus comentarios claro, yo feliz!
;-D

Sevilla dijo...

;-[

gaveta dijo...

que siiiiiiiiiiii
no todo va a ser crocheteo ;-D

Txumai dijo...

prueba aqui que hay muchos comentarios, a ver si me deja comentar

Hellfire dijo...

El Principe tampoco lo pasa bien en estas historias de zapatos de cristal. Siempre bajo la amenaza de que le endosen a las hermanas feas y desagradables, con el peso del Reino, sin poder decidir por si mismo se limita a tratar de ganar tiempo recorriendo la comarca tomando medida de su reino, tipo el Viaje de Alfonso XIII a las Batuecas...

..me he ido completamente de la historia, me suele ocurrir...

Sevilla dijo...

No creas hellf, las atribuciones de roles de género son igualmente impositivas para ambos, el principe tiene que ser apuesto y valiente, es lo que tiene cuando estás condenado al espacio público

Ahí es donde está la trampa, dos sexos distintos, dos espacios diferentes (público-privado) y excluyentes.............. cuando por sexo te atribuyen un espacio y no te dejan o no está bien visto que entres en el otro..............

La diferencia física no tiene porque implicar incapacidad para varias facetas

Es una trampa y una losa pesada para ambos

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